Como ya se ha visto anteriormente en un artículo anterior, el baño constituye en sí mismo una fuga energética con lo que hay que mimar mucho este espacio a la hora de elegir los colores y materiales.
El caso que a continuación tratamos es probablemente un ejemplo claro de lo que NO debemos hacer en un baño.
El baño es en sí mismo sinónimo de elemento agua debido a las distintas instalaciones que allí se derivan: inodoro, lavabos, ducha, bañera, bidé… con lo que incorporar materiales y agua predominantemente agua no son nada conveniente:
- Gresite azul que recuerda al interior de una piscina
- Inodoro azul intenso
- Mampara con el efecto de una ola
Todo ello produce un efecto visual de ahogamiento que podría verse reflejado en nuestras finanzas, relaciones o proyectos frustrados.
RECOMENDACIÓN FENG SHUI
Si os gusta el efecto gresite en los baños siempre se pueden elegir colores más suaves, como los beige o tierra que combinado con las maderas suavizan el efecto predominante del elemento agua.